Algunos disfrutes destacados de diciembre 2013

Aunque normalmente prefiero hacer crónicas de nuevos descubrimientos, ocurre que la mayoría de los nuevos sitios tienden a aperturarse en sectores de Santiasco que no me agradan del todo, ni siquiera por la calidad de la gastronomía sino por el tipo de visitante. Me refiero a ese tipo de personas que van a un lugar solo por que es moda y «es necesario» estar ahí. En este escenario de auto-restricción, me resulta mucho más deseable re-visitar sitios que ya he probado y que me merecen buena y gustosa opinión.

Cerrando este año 2013, claro que he disfrutado hartos sitios especialmente a la hora de la cena, toda vez que sigo un tanto atareado en la jornada laboral. Por cierto, eso no es obstáculo para estar siempre atento a gozar algo rico sobre todo en sitios que ya conozco en detalle.

Partiré con el sabroso e inconfundible Guria, comida española de primera y que permanece ya por muchos años en mi lista de favoritos. Una cena tardía, bastante cerca de la medianoche, en que partimos preparándonos con agua mineral y eligiendo unos ricos platos, merluza austral con quinoa y un pollo relleno que acompañamos con una deliciosa botella de Botalcura El Delirio, un ensamblaje que siempre salva. Por lo avanzada de la hora, decidimos cerrar sin postre, solo el indispensable café negro.

Un imperdible para cualquier cena es el Olan, comida peruana irresistible.Pisco sour peruano para acompañar una exquisita causa de camarones. Luego, un seco de cordero con una botella de cabernet sauvignon Santa Ema, combinación que ya he disfrutado antes y que merece repetición. Para el postre una torta de maracuyá y el bienvenido café negro que cierra una rica cena.

Una salida imperdible con mi Club Malayo fue a la laguna El Morado y glaciar San Francisco, un paseo delicioso en un día nublado y muy concurrido. La belleza del glaciar al final del cajón es sorprendente a pesar que con los años sigue disminuyendo su tamaño. Estas fotografías son el registro de este lindo paseo.

Una noche de esas no pude resistir la tentación de volver al Su, ese restaurante del hotel boutique Su Merced enfrente del Parque Forestal. Inicié la cena con una croquetas de carne exquisitas, para luego ir por una albacora que acompañé con un pinot noir Casas del Bosque, que intenté disfrutar en medio del ruido de unos entonados pasajeros. Cabe destacar que el lugar es pequeño por lo cual no es posible abstraerse de las conversaciones en voz alta. La comida como recordaba es excelente, el servicio requiere pulirse sobre todo en cuanto a conocimiento de vinos y el buen servir. Al postre bien estuvo un pudding de chocolate y mi adorado café.

Días después, caminando por Providencia, me vino la tentación de pasar a probar el restaurante del Hotel NH, el cual siempre recuerdo por su talento para deconstruir platos de comida chilena. En esta ocasión, inicié la cena con un kir royale mientras elegía mi plato de fondo. Decidí probar el Quinoa Mar y Tierra, una suerte de risotto de quinoa con trozos de carne de res y pollo, camarones y cortes de diversas verduras de colores hermosos. Para acompañar este exótico plato, conseguí una botella de merlot select terroir de Santa Ema, un encantador acierto para el paladar. Al cierre, como acostumbro, mi taza de café negro.

El siguiente disfrute fue mi encuentro anual con Inti Illimani, esta vez con la participación de Claudia Acuña como invitada especial. Un teatro Noescafé repleto y una impaciente audiencia que cumplida la hora de la cita comenzó a manifestarse. Dos horas magníficas de recuerdos de esta agrupación musical chilena tan pródiga en temas hermosos y que en esta ocasión hacen un recorrido por sus grandes éxitos con temas de Víctor Jara, Patricio Manns, Violeta Parra y otros tantos del folclore internacional. Maravillosa sesión.

A la salida del espectáculo, nada mejor que ir a cenar al Pad Thai. Confiado en mi buena estrella llegamos sin tener reserva y conseguimos una buena mesa. Partimos con agua mineral para preparar las gargantas y añadimos pisco sour Thai (con albahaca) y uno de maracuyá. Los platos, basados en curry y leche de coco, fueron un Kang Kari Camarón (curry amarillo) y un Kang Musaman Camarón (curry verde), exquisitos y abundantes. Naturalmente acompañamos con una buena botella de Syrah de Santa Carolina.

Un restaurante que se ha ganado mi favoritismo es Le Bistrot, comida francesa extraordinaria y que además goza de un servicio excepcional. Instalado en la terraza, partí pidiendo un cardinal (vino tinto con crema de cassis), refrescante aperitivo, ideal para estimular el apetito. Continué con un plato de fettuccinni a dos salmones y crema que acompañé con una pot lyonnais de 460 cc con merlot, sabrosa combinación. Terminado el goce de ese plato que he probado ya varias veces, me fui directo a un postre de nougat glace et coulis de fraises au basilic (helado tipo turrón con frambuesas y albahaca, puro placer!!) y por supuesto mi café negro.

Para cerrar el año, nada mejor que una disfrutable salida a la montaña y especialmente al cerro Pintor (4.000 mts). Fue la ocasión inmejorable para que los malayos nos despidiéramos de un año fabuloso en logros personales y del club, con muchas nuevas cumbres alcanzadas por los más perseverantes miembros del club. Comparto las fotos de esta salida de celebraciones.

En mi lado más citadino, el último #juevesdeideas de Bancoideas lo realizamos en Thelonious, ocasión ideal para escuchar a nuestro amigo Felipe Riveros en formato Trío con Carlos Cortés y Rodrigo Galarce, un desfile de acordes maravillosos que nos llenaron de energías y ganas de continuar con nuestro amado proyecto.

Adiós 2013 y bienvenido 2014!!!!

Cristian Gallardo Cuarteto : lanzamiento de Puro Jugo

En el intenso cronograma de actividades culturales del GAM, un ciclo de jazz llamado Animales en la Via, nos daría la oportunidad de disfrutar algunos filetes notables. Esta noche era el turno de un lanzamiento virtuoso de un nuevo disco de la agrupación Cristian Gallardo Cuarteto, liderado por el homónimo saxofonista, flautista y compositor, secundado por  potentes músicos, al piano un concentrado Gonzalo Palma, un virtuoso del contrabajo Cristian Orellana y la potente batería de Carlos Cortes.

Llegamos tarde al concierto, pero eso no fue excusa para que el krrt fuera formidable, ya que la banda es notable, la salvaje ejecución de la batería, el piano delicioso con acordes virtuosos, acompañando de manera notable al trabajo de Gallardo en el saxo y el acompasado deleite del contrabajo que Orellana sabe hacer.

Un recital delicioso, lanzamiento de disco, pero sobretodo una muestra de talento increíble que fue coronado con un bis, que trajo al auditorio un fantástico tema del disco anterior de la banda.

Músicos jóvenes con un talento formidable, es una delicia disfrutarlos en vivo.

Il Siciliano : disfrutando pastas y vino

Es un viejo lugar de la zona taquillera de Bellavista y que por diversas razones inexplicables pocas veces he visitado. Confieso que la mayoría de las veces me tiento más con otras comidas o lugares alrededor de este restoran.

Llegué temprano a cenar tras un agitado día en cleta y compromisos varios, lo que me permitió elegir una buena mesa sin tener que haber hecho reserva. El lugar es bonito y se han preocupado de mantener un buen look a pesar de los años, la barra del bar es estupenda y el diseño de los espacios está muy bien logrado.

Partí con mi habitual agua mineral sin gas, momento que siempre aprovecho para hurgar en la carta y dejarme seducir. Me interesé prontamente con un Carpaccio alla Ducale, una maravilla que no había probado antes. Son unos finos cortes de filete sobre los cuales se distribuye un conjunto de rollitos de prosciutto, queso parmesano y cortes de champignones. Solo tuve que poner algo de limón, aceite de olivas y conseguir pimienta fresca para esparcir unos cortes pequeños de pimienta sobre el plato. Exquisito!!!

Exploré la sección de vinos de la carta y le apunté justo al que no tenían, sin embargo, habían buenas opciones y terminé eligiendo una botella de carmenere Reserva de La Joya 2009, que me acompañaría el resto de mi entrada y los fondos que luego pediría.

De la carta elegí un plato que desconocía, un Fazzoletti Siciliani, pasta rellena de mariscos con una salsa de champignones, mozarella sobre espinacas a la crema, todo cubierto con salsa de tomates y gratinado con parmesano. Nada que añadir, un plato 100% disfrutable y hermosamente presentado en un plato de fierro muy caliente.

No podía dar por terminada la incursión sin pedir un buen postre y el elegido fue un Suspiro di Sicilia, un bizcochuelo relleno de crema limón y cristales de merengue. Postre que se dejó acompañar maravillosamente con un buen café negro.

Deliciosa cena y espectacular partida de una noche de jazz. Esta noche en Jazz Bellavista (club de jazz de Le Fournil) se hacía la despedida del maestrísimo pianista y compositor Felipe Riveros, quien junto a Sebastián González en contrabajo y Carlos Cortés en batería, daría una sesión imperdible de buen jazz.

Felipe migra una temporada a Paris, según me confiesa sin ningún proyecto específico y solo a visitar a su novia. Como sea, la sesión musical fue fantástica con un recorrido por temas de algunos de sus discos. Le pedí que tocara Santiago, un tema maravilloso que me recuerda siempre a E.S.T. y que lamentablemente no lo tenían ensayado. Tendré que esperar el regreso de Felipe para que cumpla mi musical anhelo en una próxima tocata.

Gran noche!!

Un buen krrtrekking para cerrar la semana

Tras una semana definitivamente alocada y tremendamente trabajólica, necesito una inyección de placeres que me reconcilie profundamente con los disfrutes del cuerpo y así hacer descansar mi mente.

Partimos con una sesión de danza moderna, la Sinfonía Fantástica del BANCH, una obra musical francesa bien premiada adaptada ala coreografía por  el talentoso Gigi Caciuleanu, presentada en el Teatro Baquedano, el Teatro de la Universidad de Chile.

Una obra curiosa, con una lenta  partida y una hermosa bailarina solista, con textos poéticos en francés mezclados con algunos poemas en castellano. Poco a poco, va apareciendo el resto del ballet y la música y el baile comienza a fluir. Un sencillo escenario, con escasos recursos de escenografía, pero suficientemente efectivos para ir transformando los espacios y no estorbar el despliegue de los notables bailarines. Es una obra que crece progresivamente en intensidad y nos lleva al paroxismo hacia el final. Es sin lugar a dudas la historia de amor que inspiró al compositor francés Berlioz. Hermoso espectáculo!!!

Hambrientos, decidí ir a buscar un nuevo sitio en Bellavista y los pasos mágicos nos llevaron al Republicano, un sitio que desde enero 2011 reúne una cantidad importante de clientes en esa casona enorme y preciosa, con un diseño ecléctico pero brillantemente armonioso.

A nuestra llegada, la música excelente y a un volumen atinado, un buen lounge y ambient ideal para estimular una buena experiencia. Bastante lleno y aprovechando lo friolentos que son los chilenos, encontré espacio en una terraza del segundo piso que da hacia el rico restobar La Mordida.

Pedimos unos buenos kir royale de aperitivo y de la carta, por cierto abundante y sabrosa, elegimos una plateada a la greda, deliciosa!!!. Sin embargo, el hambre continuaba en altos grados, así que pasamos a explorar los sandwiches, ya que no queríamos cenar. Muchas mesas y pocos mozos, lo cual comenzó a impacientarme ya que el servicio comenzó a ser sensiblemente lento.

Pedimos unos sandwiches enormes, basados en marraquetas (que rico) y que ocupaban un tremendo plato y acompañados con unas papas asadas deliciosas. La Nación y el Republicano, fueron los elegidos y exquisitamente acompañados por un ensamblaje de cabernet franc y merlot de Oveja Negra. Gran combinación!!

Mientras disfrutábamos los ricos sandwiches, se produce un cambio lamentable en la música, suben el volumen y ponen cumbias, baladas sesenteras y una combinación rarísima de música tropical que rapidamente me molestó. Esa no es música para cenar, ni siquiera para beber unos tragos. Pedí cuatro veces la cuenta, hasta que finalmente pudimos salir del lugar.

El detalle de la música, me hizo conectar rapidamente con un buen filete de jazz, por supuesto, nos fuimos directo al Thelonious para disfrutar una sesión de jazz en vivo. El notable Erwin me saluda en la entrada de su boliche, como él lo llama y nos instalamos en mi mesa habitual, mientras comenzaba una maravillosa sesión con Andrés Pérez Quinteto y su obra Santiago Vivo. Acompañado de Cristián Gallardo en saxo alto y flauta traversa, Mauricio Rodriguez en guitarra, Carlos Cortés en batería y Marcelo Córdova en bajo, hacen un despliegue talentoso de buen jazz.

Mientras escuchaba la música que llenaba el local, cerrando los ojos  imaginaba como sería una coreografía de danza con una base musical así. Maravillosa de todas formas.

Gran krrtrekking!!!

Cristián Gallardo Cuarteto : jazz delicioso

Disfrutar buen jazz a veces es sinónimo de ir a mi sitio fetiche, el Club de Jazz Thelonious, pero es verdad ya que cada semana demuestra que en este lugar hay atrevimiento, fuerza y novedad musical.

Tras una larga charla con Erwin en la entrada del Club, pude constatar que la fiebre, la fuerza que hace que este lugar de jazz sea tan importante, nace de una única consideración, lo bueno atrae lo bueno!!!

El frío de la noche hizo que decidiera ingresar y tomar una mesa mientras la pequeña  musa me ofrecía lo de siempre, la verdad es que lo mejor del club ya lo determiné hace mucho tiempo y las chicas que atienden me conocen mis gustos.

Hoy era una noche de lanzamientos, un nuevo disco que saldrá a la luz a fines de año, Cristián Gallardo en saxo, acompañado de Gonzálo Palma en piano, Cristián Orellana en contrabajo y Carlos Cortés en batería, mostraron un trabajo depurado, una vertiente de bellezas jazzísticas que bien merecen un titular.

Pasadas las 2 de la madrugada, después de una deliciosa tocata, disfrutes intensos de un buen jazz, tuve que armarme de fuerza para regresar a mi dpto.

Thelonious, lo mejor del jazz en Santiasco!!!!

Andrés Pérez Quinteto : filete nocturno

Para concluir mi krrtrekking de viernes, no pude dejar de ir a una tocata de jazz en vivo en mi querido Thelonious. Una función que prometía ya que el maestro Andrés Pérez (saxo tenor y composiciones) iba a mostrar el trabajo que viene realizando con su nueva agrupación.

Llegué a la segunda parte del show y el club estaba repleto. Pero mi gran compañero Erwin, se encargó de hacerme un lugar en la barra con muy buena vista al escenario. Además de Andrés Pérez, estaba el sinigual Cristián Gallardo (saxo alto / flauta) con quien suele tocar en Contracuarteto, se suma el talentoso Tomás Krumm al piano, un contrabajo de primera en manos de Marcelo Córdova y el gran batero Carlos Cortés.

Un temazo de la noche fue Mapocho Actual, puso toda la carne a la parrilla, exigiendo al máximo a todos los músicos. Aplausos ultra merecidos.

Inteligentemente, Andrés seleccionó alternadamente temas rápidos y cargados al saxo con otros en donde el piano daba la nota relevante. Gran show!!!

Jam session : jazz de media semana

No es un misterio que soy adicto al jazz en vivo y especialmente en mi lugar favorito, el Thelonious. Pero más me gusta los miércoles porque esas noches se puede disfrutar el talento de muchos músicos chilenos de campeonato.

El grupo base lo forma el guitarrista Mauricio Rodriguez (La Marraqueta), el baterista Carlos Cortés y el contrabajo de Rodrigo Galarce, quien fue reemplazado en esta ocasión por Pablo Vidal, con mucho acierto.

Los primeros temas fueron creando el ambiente en el club, el cual estaba muy lleno, lo cual me alegra mucho pues muestra que un buen espectáculo se puede exhibir a media semana, en vez de concentrarlo todo en viernes y sábado, como suele ocurrir.

A medida que avanzó la noche, fueron rotando otros músicos en la batería, en el contrabajo y el aporte notable de Cristián Gallardo en el saxo.

Excelente trabajo y un aplauso adicional a Erwin, el gran poeta anfitrión de este club y mejor amigo.

Quinteto Colectivo: deliciosa sesión de jazz

Esta sesión de jazz prometía mucho. Varios maestros partiendo por Sebastián Jordán en trompeta, el incomparable Agustín Moya en saxo tenor, seguido por René Sandoval en contrabajo y Carlos Cortés en batería, todos ellos acompañados por un músico que siempre me sorprende, me refiero a Rodrigo Dañobeitía, en guitarra. Low profile, es su marca.

Salvo excepción, los temas que tocaron esta noche le pertenecían a Agustín Moya (como te exiges!!!!) y secundariamente a Sebastián y otros autores.

Una sesión virtuosa, llena de desafíos musicales, que nos hicieron enormemente disfrutable la sesión. Cuando comenzaba la segunda parte, un visitante furtivo Felipe Riveros se apareció y fue abducido por la banda, le pasaron la pauta musical y en menos de nada, los acordes de piano comenzaron a alimentar la tocata. Fantástico, cada acorde de piano hizo un milagro en el disfrute de esta noche.

Este Sexteto casual, es una maravilla, preciosa noche!!!!