Tour de Museos : volviendo al krrtrekking

Hace ya varias semanas que no me daba el gusto de hacer un krrtrekking cultural por Santiasco. había pasado suficiente tiempo como para una renovación completa de la cartelera y eso estaba por verse.

Pasado el mediodía de un asoleado domingo, enfilé mis pasos hacia Providencia. para iniciar una caminata por el Parque Balmaceda, tranquilo y grato paseo, que me llevó directo al edificio de Telefonica. Allí me esperaba el último día de la exposición fotográfica «Territorios y Existencias», una muestra que ya había visitado y que con la ayuda de recámaras luminosas evoca la potencia de decisiones territoriales de quienes viven en lugares extraños, remotos y muchas veces poco acogedores. Magdalena Correa recorre con su cámara el desierto y nos imprime luminosos retazos de vidas extremas en desiertos capturados en su virtuosa fotografía.

Junto a lo anterior, una nueva exposición, de cine e historia del esplendor hollywoodense, ese cine heroico, sin photoshop ni efectos de computación, el Hollywood Clásico, Orson Welles, Hitckoch, Brando, Garland, Bogart e incluso Kubrick . Más de 250 fotografías del cine clásico, con escenas de las películas y el making of de las distintas etapas de producción de estas inolvidables expresiones del llamado séptimo arte desde fines de los 30 hasta los 60 del siglo pasado.

De Plaza Italia, me fui al Centro de Arte Alameda (puchas, para mi sigue siendo el viejo Cine Arte Normandie), para observar una breve muestra de fotografías de la vieja bohemia santiasquina, todo esas expresiones que giraron entorno a las revistas picarescas del Bim Bam Bum, plumas, chistes y cuerpos bailantes de bien dotadas mujeres. Reminiscencias de un pasado que sepultó el toque de queda en tiempos de dictadura.

Los pasos me llevaron rápidamente hacia mi querido MAVI, el museo de artes visuales en el barrio Lastarria. Tras la notable muestra de nuestro Matta en días pasados, los cinco pisos del museo se llenaron de colores, para dar paso a diversas muestras fotográficas y de cuadros con técnicas eclécticas, todas expresiones del arte moderno, que sin pudores expresa de múltiples formas el reflejo de la mirada artística, de las ensoñaciones y emociones de los artistas. Mucha fotografía bajo el alero de «Madrid Mirada», proyectos fotográficos de sombras y significados diversos. Me gusta este museo, siempre está abierto a explorar posibilidades del arte.

Una breve pasada por la deliciosa tienda de música y videos, Kind of Blue y llego al Museo de Bellas Artes (MNBA). Recambio completo de muestras, gran oportunidad para disfrutar.

En el primer piso, esculturas de cobre en el hall, y a cada lado, las salas con la muestra «Exijo una explicación», ¿Condorito no?. Pues bien, es la mayor muestra que he visto de los dibujantes humorísticos y políticos de Chile. Muchos más de los que yo conocía, quedé deliciosamente sorprendido. A Lukas, se suman Themo Lobos, Armstrong, Hervi, Vivanco, Karto, Pepo, muchos más e incluso un joven Kristiano a quien conocí hace unos años atras. Divertida muestra y muy completa revision del humor político y la historieta nacional. Muy recomendable para todos. Incluso hay historietas animadas desplegadas en monitores para disfrute de quienes se detengan por ahí.

En el segundo piso, una muestra singular, una suerte de deconstrucción de Las Meninas de Diego Velasquez a cargo de Roser Brú y del notable Cienfuegos. Una reinterpretación creativa de la mejor obra de Velasquez. Muy interesante.

En el subterráneo, fotografías. No hay que extrañarse, este es el mes de la fotografía (FotoAmérica). De hecho, saliendo del MNBA, fui presuroso al MAC que curiosamente estaba cerrado. Sin embargo, me encontré en pleno con algunos de los resultados de la Fotomaratón Arcos 2008, una iniciativa genial. Imaginen que llegan en tenida deportiva y cámara en mano a una hora prefijada y te dan el tema de lo que puedes fotografiar y el plazo en que debes volver con tus descubrimientos. Maravilloso, casi cien metros de hilos con fotografías colgando de ellos, como resultado de la creatividad colectiva. Fotos deliciosas, personajes de la calle, edificios, portadas singulares, trozos de Santiasco retratados con impudicia, muy buenas fotos!!!!

Despues de este artístico periplo, ya me vino el hambre en todo su esplendor y que mejor que almorzar en Victorino, barrio Lastarria. Pedi una botella de agua mineral para refrescar esa garganta ya espesa con tanto calor y mis ojos se fueron directo a un filete con costra de mostaza, acompañado con un couscous al pesto y mantequilla. hummmm!!!!!. Q rico no?. Lo acompañé con un rico ensamblaje Trio (cabernet sauvignon, syrah y cabernet franc). Despues de ese delicioso plato, solo me quedaba gozar un buen postre, no me hice de rogar y me devoré un brownie tibio de zapallo con helado de canela y un adorno de chocolate blanco y negro. fantástico!!!

Lleno de sabores y deliciosas imágenes, decidí retirarme a mi cueva a descansar y escribir.

Buen domingo en Santiasco!!!!

Fomingo : inventando disfrutes

No soporto un día fome, así que en el momento que desperté (a mediodía), me dispuse a sacarle buen jugo al día, a pesar del calor espantoso de Santiasco y a la ausencia de cierto ser que añoro.

La verdad es que tenía presupuestado ir al Salto de Apoquindo, camino a Farellones, un trekking prometedor, pero no tuve transporte. Bueno, siempre tengo plan B.

Partí con un delicioso paseo al cerro San Cristóbal en bicicleta, esas dos horas y fracción son un extraordinario reencuentro con la belleza de este cerro de la capital. Poca gente, mucho extranjero. Forcé la marcha para sentir el cerro y de paso saber como me encontraba tras varias semanas sin practicar este paseo. Lamentable, me cansé como bestia, pero hace tan bien que fue un disfrute como siempre. Veinte minutos a la cumbre, mote con huesillos, que en esta ocasión se transformó solo en jugo de huesillos (dos para ser exacto), ruta hacia Antilén, luego a la Pirámide y otros caminos posibles. El cerro San Cristóbal es delicioso, se puede disfrutar de muchas formas y por diversos caminos.

Una bajada de locura y con riesgo vital, cometí un error a 54 Km/hr y casi me caigo, me salvó el instinto, ese que me dice mantén la calma, no va a pasar nada. Vaya susto, fue grande.

Una rica ducha y salí a pasear por los museos de Santiasco. MAC del Parque Forestal, cerrado. Museo de Bellas Artes, maravilloso, siempre con sorpresas. La muestra de la prolífica obra arquitectónica de Rogelio Salmona. Este artista colombiano con 50 años de trayectoria magnífica nos deleita con sus creencias virtuosas, espacios disfrutables y sociales, una inteligentísima composición de los volúmenes y de las miradas que asombra, espacio público, espacio democrático. Verdaderamente un genio, capaz de usar la naturaleza respetuosamente para dar el máximo beneficio de utilidad y al mismo tiempo de aprecio por la belleza que interviene.

Otro aspecto delicioso del museo es la exposición de fotografías del Fotoclub, 70 años del Foto Cine Club de Chile, fotos maravillosas, de niños, de paisajes, de rostros, de hermosos desnudos de todas las épocas. Un gran deleite visual.

De ahí, me dirigí, como siempre al MAVI, pero estará cerrado por febrero. En fin, no quedó opción, era hora de almorzar algo rico (por lo demás pasaban las 17 horas). Llegué al Victorino, uno de los pocos lugares de Santiasco, que atienden un domingo por la tarde y hay chef disponible.

Pedí un Mahi Mahi (que delicioso pescado caribeño), finamente cocinado y tostado, servido con pastelera de choclo y hojas de rúcula, acompañado de un delicioso pinot noir a la temperatura precisa. La música del local estuvo fantástica y la casi soledad también. Exquisito, fue un almuerzo notable solo acompañado por mis lecturas de Eckhart Tolle. El único reproche al chef es que debió hacer más dulce la pastelera para crear el contraste profundo con la carne del pescado. Solo un detalle.

En fin, a pesar del calor, Santiasco se puede disfrutar.