Nuevo Krrtrekking sabatino : disfrutando el arte callejero

Desperté algo acalorado, ya era bastante tarde y tras el reparador sueño sentí ganas de salir de paseo con mi adorada cleta. Mochila, cámara fotográfica, agua, algo de dinero y comenzamos el paseo.

La primera parada en el barrio Lastarria fue en el Mesié Quiltro, pretendía tomar un buen café y quizás comer un rico sandwich gourmet, pero nunca apareció la atención y yo me aburro rápido. Así que tomé mi cleta y me fui al Café del Ópera, en donde además de un rico jugo natural me devoré un baguette completo con queso camembert, rúcula y pesto de tomate, al cual pedí añadir trozos de palta. Un desayuno a lo campeón.

Con toda esa energía en el estanque, me dirigí hacia la zona poniente de Santiasco usando el Parque Forestal para llegar a la zona del Parque de los Reyes y comenzar un divertido zigzagueo por los barrios Brasil  y Yungay, en donde encontré una gran cantidad de grafittis deliciosos.

Una vez agotado el periplo en esa zona, decidí ir más allá y me fui directo hacia el M100 pero estaba cerrado, así que mi siguiente parada fue la Biblioteca de Santiago, en donde encontré una exposición colectiva llamada «EL VESTIDO. NO HAY PUNTADA SIN HILO» del Colectivo Kimkilen, muchas mujeres y peruanos lo cual me pareció muy bien en una exposición chilena. También visité la exposición permanente de la industria del Cobre en el segundo piso y el ausente restaurant del último nivel. Muy tierna la exposición de pinturas de niños en el zócalo y la oportunidad de beber agua mineral en la pequeña cafetería en ese sitio.

Siendo ya varias horas de paseo, decidí regresar a casa para poder cocinar algo rico y concluir este delicioso disfrute sabatino. Dejé unas lindas fotos para compartir.

Mesié Quiltro : un rico desayuno

En fines de semana y antes de iniciar un ascenso en cleta al cerro San Cristóbal, me resulta especialmente disfrutable ir a servirme un desayuno especial. Se me había convertido en un rito ir al Café Ona, sin embargo desde que la sastrería decidió ampliarse, el Ona desapareció. Lo afortunado es que inmediatamente al lado, nació Mesié Quiltro.

Los clientes habituales del Ona transitaron sin problemas a este nuevo sitio según me comenta el dueño y era mi ocasión de probar.

De la pequeña carta elegí un pantumaca con jamón serrano (literalmente es pan frotado con tomate y el nombre deriva de una castellanización de la palabra catalana, pa amb tomaca). En simple son trozos de pan tostado untado en tomate molido y cubierto con jamón serrano y toques de aceite de olivas. Exquisitos!!!

Acompañé con un rico café colombiano con leche mientras disfrutaba la tranquilidad de una mañana dominguera. El experimento, claramente exitoso. Volveré!!