Baco : siempre delicioso

Cuando se vive la canícula espantosa del verano santiasqueño, hay pocos sitios que pueden darte agrado. Mi fórmula probada incluye la terraza exquisita del Baco, un restoran de Providencia que se ha preocupado de hacer agradable el lugar. Mientras me acerco, puedo observar como han montado mangueras aéreas para proveer un rocío húmedo sobre su divina terraza, un detalle que agradezco con aplausos.

Me instalé en una buena mesa disponible y clamé por una botella de agua sin gas para refrescarme. Algo que por supuesto lo tienen previsto, ya que siempre te reciben con una botella de agua helada y delicadamente cítrica, para pasar el calor tremendo de este santiasco. Poco a poco recuperé el control sobre la temperatura de mi cuerpo y fui capaz de escudriñar la siempre disfrutable carta de platos de este rico lugar.

Estuve tentado de probar aves exóticas, algo propio de la cocina francesa, pero por pudor, decidí que comería res. Pedí un plato que he gozado muchas veces y no me cansa, Se trata del filete con salsa bernaise con papas pont neuf, una delicia que siempre me hace delirar. La carne del filete la pedí jugosa (puede ser sellada, jugosa o rosada), lo cual implicó que recibí una maravilla de carne que jamás sangró y que mantenía su sabor y jugosa perfección hasta el final. Acompañada de unas papas fritas a la francesa y esa deliciosa salsa bernaise en un pote y que disfruté hasta que se extinguió.

Un plato de ese calibre requirió dos experimentos con copas de vinos. Primero decidí por un cabernet franc Gillmore 2007 y luego añadí un delicioso ensamblaje de Parcela 7 también del 2007, maravillosas compañías para esta exquisitez.

Extasiado de sabores, me atreví con un buen postre y la tentación fue un Fondant au Chocolat, por favor imaginen un bizcocho de chocolate, relleno de salsa de chocolate caliente y una porción de helado. El contraste de temperaturas es exquisito!!

Por cierto, un buen café negro es un buen cierre para esta ocasión placentera.

Le Flaubert : siempre exquisito

Hoy necesitaba un buen lugar para un almuerzo con una gran amiga, quien enfrenta un grave trance médico en su vida. Tenía que ser un sitio en Providencia y con una buena y tranquila terraza. La decisión fue certera, nos fuimos a Le Flaubert.

Este sitio tiene muchos años y muchos fans y lo tiene merecido, es una cocina francesa breve, precisa y en extremo sabrosa. Fue divertido ver en la misma terraza al escritor Skarmeta y al ex banco central Carlos Massad, cada uno en su mesa en animadas charlas con sus invitados.

Una vez instalados, agua mineral sin gas para refrescar las gargantas y un plato de tostadas para disfrutar un paté de foie de pato, extraordinario.

La carta llega, como siempre, en una linda pizarra y atril que podemos observar desde la mesa y dejarnos tentar con sus delicias. Un lomo Robespierre (cortes de lomo en sal entera, especias y alcaparras con un acompañamiento de verduras salteadas) y un filete Rossini (fantástico filete en salsa al vino y especias, un trozo de pastel de papas a la crema y verduras salteadas), todo lo cual lo acompañamos con uno de mis ensamblajes preferidos, Parcela 7 de Von Siebenthal, un verdadero manjar.

Intensa y emocionante conversación, estoy seguro que el placer gastronómico también contribuyó a la energía positiva que mi amiga necesitaba en este momento.

Le Flaubert, un restoran premium!!!