The Clinic : un divertido almuerzo laboral

Suelo incentivar el lado B de mi equipo y a veces creo que ya no necesitan estímulo alguno. Me sorprendieron con la organización de un almuerzo para todos los que quisieran asistir y a un lugar bastante taquillero y con una muy adecuada relación de precio – beneficio. Una gran forma de concluir el año, un año lleno de eventos desacostumbrados, con muchísimas y fuertes emociones y también con enormes desafíos que supimos atender.

Alrededor de las 14:30 horas un buen lote de compañeros laborales nos dimos cita en el divertido local de The Clinic, un sitio que ya habíamos probado y que era ideal para un encuentro de todos los miembros de la gerencia con ganas de pasarlo bien. La reserva nos aseguró un rincón muy apropiado para alojar a los prendidos de siempre y a los que se animaron en esta ocasión.

Ubicado en una casona maravillosa que alguna vez alojó un teatro, la sede de un partido político, la rica Casa Abarzúa, es ahora el territorio irreverente y especialmente simpático de The Clinic, hijo putativo del pasquín que nos hace reir periodicamente en los kioscos.

Partimos deleitándonos con unos frescos borgoñas, pan y mantequilla, unos ricos ceviches para compartir, mientras se las arreglaban para traer más de 20 platos a la vez. Como había mucha buena onda, no importó demasiado el tiempo de espera, ya que hay material más que suficiente para entretenerse, desde la carta (una pequeña y diverttida revista), los textos en las paredes (demasiado divertidos, desde discursos políticos de los 70’s pasando por imbecilidades propias de la dictadura, hasta fantásticas frases de los «inteligentes» políticos chilenos), también un monitor de TV en donde se puede disfrutar de divertidos cortos.

Yo estaba con los minutos contados así es que aproveche los pitutos para acelerar la llegada de mi plato y pude almorzar a tiempo (una corteira, fiel contrapunto para la longueira que otros pidieron) para poder volver a mi pega a atender una importante reunión que cerraba mi año laboral.

The Clinic, divertido restobar en Santiasco!!!

Centenario de Salvador Allende en el CCPLM

En el Centro Cultural del Palacio de La Moneda (CCPLM) se presenta una exposición enorme y nutrida de obras de arte correspondientes al llamado Museo de la Solidaridad, creado a partir del golpe militar y el martirologio del Presidente Allende a cien años de su nacimiento.

Las dos salas (oriente y poniente) más el hall y una zona tras el muro del piso inferior de este Centro, se dedican a la exhibición de obras de muchos países, todas donadas al Museo de la Solidaridad a través de los años. Sorprende la presencia de España (post Franco), Francia, Suecia y tantos otros países, incluido Argentina y Cuba.

Es una seleccción de obras pictóricas y algunas bonitas esculturas, todas de alguna forma representan dolor, no se si son mis emociones o las que desprenden estas obras, pero me sumí en una tristeza profunda tras recorrer las galerías. Eso es lo que queda?

Por fortuna, en el nivel -2 puede encontrarse un resumen de la presentación del diseño moderno, Maurer, Artemide, Magis y Alessi, diseños extraordinarios y hasta prácticos, lámparas, muebles y aceros, insospechadas posibilidades.

En el nivel -1 puede encontrarse (y por el mismo precio de entrada) la exposición de la obra de nuestra Violeta Parra, asombrosa, sencilla y trascendente.

El CCPLM se las trae este mes!!!