Regreso a Mexicana Restaurante

Esas noches en que a todos se les ocurrió ir a restaurantes, es la peor situación cuando quiero cenar tranquilo en el barrio Italia. Tras dar una larga vuelta por todos mis lugares conocidos y cuando estaba dispuesto a abandonar el barrio, me encontré con un viejo conocido, el restaurante mexicana.

Creo que han pasado unos 5 años desde que estuve ahí, nada ha cambiado. Es como un deja vu, camino observando paredes, muebles, adornos y todo es igual, incluida la sencillez. Apenas elijo una mesa, se acerca amable una chica con la carta. Rápidamente elijo una cerveza erdlinger negra y un plato de ajíes rellenos de puré de porotos negros y queso fresco. Estaban potentes y me consumí apresuradamente mi fresca cerveza.

No contento con el tremendo plato anterior, ordené una porción de burritos rellenos de carne, arroz, queso y porotos. A pesar de mi esfuerzo por prolongar el disfrute de estos sabores, una señal desde mi estómago que me decía que era suficiente. Demasiado rico!

Claramente no iba por el postre asi es que llamé a la chica y le encargué un café negro y la cuenta. Era necesario regresar a casa, caminando como corresponde.

Plaza Garibaldi : delicias mexicanas

Me gusta la comida mexicana y me gusta más cuando puedo volver a este antiguo lugar del barrio Brasil.

Cualquier día es un buen día para disfrutar, así que entusiasmé a un amigo para ir a  almorzar al Plaza Garibaldi. Llegamos a buena hora para elegir la mejor mesa (después se llena) y partimos con unos cócteles margarita, en mi caso elegí una variante Blue. Compartimos una porción de totopos con un mix de carne, frijoles negros refritos y una porción del pebre mexicano (pico de gallo). Muy buen comienzo!!

Para los fondos decidimos compartir unas fajitas de lomo, pollo y camarones, acompañadas por todos esos potes de ingredientes mexicanos deliciosos, guacamole, frijoles, crema, salsa pico de gallo, salsa de tomates picante y queso. Un festín de sabores irresistible!!!. Acompañamos con una botella de syrah que quedó estupenda en la combinación.

Satisfechos pero con ganas de probar algo más, dimos con un postre demasiado rico, un pie de coco. Demasiado rico!!!

Garibaldi, sigue siendo mi lugar mexicano favorito.