un día intenso : vuelve el krrtrekking

He tenido jornadas laborales tan intensas que he debido concentrar actividades en días viernes y fines de semanas para poder hacer lo que más me gusta. Es un periodo de exceso de trabajo, por lo que la compensación debe ser igualmente intensa. He aquí mi fórmula del equilibrio.

Partí por asistir a una deliciosa sesión de choripanes, un formato sabroso de reunión con mi equipo de trabajo y una suerte de replica del cumpleaños de uno de los miembros del equipo quien posee una bien lograda afición por cocinar y disfrutar la comida. Nada mejor para mis gustos.

Instalados en la terraza del departamento, una parrilla eléctrica para las carnes y  los bebestibles y complementos (incluyendo un enorme filete de vacuno) corrieron por cuenta de los invitados, con lo cual aseguramos tener más que suficiente para disfrutar un excelente tiempo juntos. Estuvo divertido y sabroso, pero debí abandonar pues tenía entradas para el teatro. Hoy era la última función de la selección de teatro argentino que el Teatro Noescafé ´preparó para este año.

Debo confesar que habiendo sido excepcionales las tres obras anteriores (El Filoso Fo, 39 escalones y Un dios salvaje), mis expectativas eran descomunales. La obra que se presentaba, El Descenso del Monte Morgan, contaba con un guión delicioso de Arthur Miller y buenos actores argentinos, pero me quedé con la sensación de estar un tanto sobreactuados. Es una obra sobre un tipo que había encontrado la fórmula de la felicidad siendo bígamo y un desgraciado accidente de carretera (descendiendo el monte Morgan, por supuesto) provoca la debacle, al juntar a sus dos cónyuges en el hospital. Muy divertida y bien lograda en lo general, pero de todas formas me quedo con las tres obras anteriores.

A la salida, un poco de hambre nos llevó hacia El Ancla, para disfrutar un ceviche imperial (exquisita combinación de pescado, camarones y pulpo con los ricos ingredientes típicos de un buen ceviche peruano) acompañado de un buen pisco sour y luego seguir con un rico plato de locos con potes de salsas y papas mayo. Un festín sano y reponedor para enfrentar el siguiente evento.

Pasada la medianoche, un espectáculo de música electrónica único, DJ Caso, DJ Bitman y DJ Caso, todos juntos en una tocata a todo volumen llamada United Breaks. Una larga fila debimos hacer para ingresar a las catacumbas del Subterráneo (hace años que no lo visitaba), llenísimo de gente prendida con los buenos cortes y temas de cada DJ. Fue un espectáculo intenso y non stop con seis consolas en las manos virtuosas de los mejores DJ’s nacionales.

Ya bastante tarde, partimos junto a mi hermano a rematar la noche a uno de los pocos lugares activos, el LunaPub, en donde pedimos unos ricos tragos y una tabla mediterránea, quesos variados, aceitunas y jamón serrano. Un cierre de madrugada para un día de disfrutes muy intenso.