Sebastián Jordán Trío : disco en vivo

La grabación de un disco en vivo en Thelonious siempre es un evento notable. Esta noche tocó el turno del talentoso trío conformado por Sebastián Jordán en trompeta y composiciones, Pablo Menares en contrabajo y el increíble Félix Lecaros en la batería.

Lleno total en el local lo que solo pude soslayar con la atenta intervención de mi estimado amigo Erwin, quien me consiguió una mesa para disfrutar el espectáculo.

Hace muy poco tiempo había tenido la oportunidad de ver en formato quinteto a Jordán, con los acordes notables de un saxo (Agustín Moya) y un piano (Lautaro Quevedo). Sin embargo, talentoso como es, eligió una combinación especial para este disco.

El escenario preparado con todo lo necesario incluidos micrófonos profesionales y pasadas las 23 horas, se inicia un periplo prodigioso de temas en donde no solo la trompeta, sino cada instrumento tuvo su momento estelar. Qué gran combinación de sonidos!!!!

La exigencia para cada intérprete fue total y el resultado espectacular. Nuestros prolongados aplausos quedaron registrados en este disco que espero añadir pronto a mi colección. Bravo por el jazz nacional!!!!

Cuarteto Sumar : filetazo

Con Esteban Sumar en las composiciones y en la guitarra, tuvimos la ocasión de disfrutar el arte de los maestros Andy Baeza en la batería, Claudio Rubio en saxo tenor y Pablo Menares en contrabajo.

Thelonious con bastante gente en vísperas de un feriado largo en Santiasco, como siempre el gran Erwin, el alma del lugar, me vino a saludar. Son tantos años de vernos, que pienso me considera parte del lugar.

Nos acomodamos en un grupo de mesas enfrente del escenario y a disfrutar. Una secuencia deliciosa de temas de Sumar, muy nu-jazz, a veces rock y siempre con la cadencia del buen jazz, solos batería, contrabajo y guitarra, con el virtuoso efecto que Sumar agregaba al sonido. Luego se incorpora Claudio Rubio a mostrar porque es un monstruo del saxo tenor, temas tremendos, armados para que Rubio hiciera uso de los 10 pulmones que posee.

Gran jazz, lo mejor para cerrar una noche filetaria.

Billy Cobham Band : recital de lujo

El talentoso baterista panameño ya ha venido antes a Chile, pero pocas veces había sido tan esperado. Está claro que en la medida que visitan Chile portentosos músicos del jazz se ha ido armando un público entendido y fiel al filete jazzístico internacional.

Compré entradas con suficiente anticipación para asegurar una ubicación óptima y ver el quinteto en toda su magnificiencia musical. Lleno total en el Teatro Oriente, con gente de todas las edades, de hecho fui sorprendido con la presencia incluso de niños menores de 10 años. Notable formación están recibiendo!!!.

El quinteto formado por Jean-Marie Ecay en guitarra, Fifi Chayeb en bajo, Christophe Cravero en teclados y violín y el brasilero Marco Lobo en percusión son acompañantes perfectos para un Cobham inspirado y contundente.

La sintonía musical entre Cobham y el increíble percusionista Lobos es digno de aplausos eternos, hay una magia de sincronicidad y armonías que trasciende, hicieron vibrar al público con sus contrapuntos y desafíos de ritmos de fusión y el uso de extraños instrumentos que fueron la delicia total. Otra mención de honor es para el tecladista y violinista que puso las notas precisas, los toques mágicos para que cada pieza fuera perfecta, que lindo trabajo!!.

Un recital de dos horas vibrantes, en donde Cobham mostró porque es tan apreciado y que a sus 66 años toca la batería como nadie. Estoy seguro que eso lo sintieron los connotados bateristas que divisé entre el público, Cobham es total!!.

Sebastián Jordan Quinteto : gran jazz

Hace varias semanas que no aparecía por Thelonious, mi lugar favorito para el jazz en vivo. Esta noche tenía buenas promesas considerando la maestría de los músicos. Partiendo por Jordán en trompeta y composiciones, el increíble talento de Félix Lecaros en la batería, el inconfundible toque de Pablo Menares en el contrabajo, el sonido preciso de las notas de piano de Lautaro Quevedo y el virtuosismo incomparable de Agustín Moya en el saxo. Un filete por donde lo miren.

Llegué a punto, mientras ajustaban los últimos detalles técnicos en el escenario y con tiempo suficiente para pedir un trago y ensayar algunas fotografías antes del espectáculo.

La maravilla musical se desarrolla sin interrupción, temas exigentes, con ritmo y talento, van haciendo efecto en una abundante audiencia (sorpresa en un fin de semana largo), hay onda y los aplausos abundan ante el despliegue musical. Jordan y Moya se disputan el estrellato con toda la potencia de sus virtuosos pulmones, mientras, apenas detrás, los pulsos graves del contrabajo y las delicadas notas del piano hacen su contrapunto con la virtuosa batería de Lecaros.

Gran noche, gran tocata, el buen jazz sigue vivo en Santiasco!!

Ensemble capital: Oda al buen jazz

Juntar seis maestros del jazz chileno en una banda y hacer un espectáculo de primera, se ha convertido en un acto mágico que he visto varias veces en mi querido Club de Jazz Thelonious.

En esta ocasión, la banda Ensemble Capital, liderada por Sebastián Jordán, en trompeta y composiciones, cercanamente secundada por Claudio Rubio en Saxo tenor y numerosos arreglos, un impecable Roberto Dañobeitía en la guitarra eléctrica y composiciones, el maestro Eduardo Peña en el contrabajo, el inigualable e insuperable Félix Lecaros en la batería y la delicadeza de los acordes de piano a cargo de Tomás Krumm.

Nueva banda y prodigiosos sonidos que encontraron un local a medio llenar y con muchos músicos participando como espectadores. Una lástima que no se haya difundido más, porque fue una noche potente en sonidos y nuevas creaciones.

Bien por el jazz chileno!!

Krrtrekking de viernes

Aprovechando la visita que mi hermano hacía a Santiasco, armamos un buen krrtrekking que partiría cerca de las 21 horas con el recital de la banda inglesa Bright Eyes en el Cine Normandie. esta es una banda de indie rock que goza de mucha popularidad en eeuu, pero tamaña fue la sorpresa cuando llegamos al lugar de la tocata, pues la fila para ingresar era gigante!!!. Tuvimos que armarnos de paciencia y por más de 40 minutos esperar la lenta evolución. Como la espera genera hambre, compramos unos ricos sandwiches y bebidas con lo cual manejamos nutritivamente el proceso.

La banda realmente suena bien, un folk delicioso quizás algo new age, la guitarra (eléctrica y electroacústica) de Conor Oberst, el prodigioso vocalista, es potente y con un marcado proceso de distorsión para crear una atmósfera muy rica. En la batería un talentoso joven, Jason Boesel, quien además acompañó con coros a Conor y la mayor sorpresa fue el tecladista, Nate Walcott, quien incorporó en varios temas trompetas, genial!!!, un acierto jazzístico y por lo demás virtuoso tocando todo al unísono. Las líricas muy lindas, con un toque Bob Dylan y ocasionalmente parecido en vocalizaciones a Damien Rice. Estupendo concierto!!!.

Terminada la tocata, salimos presurosos hacia el Club de Jazz Thelonious. Esta noche tocaba una de mis bandas favoritas, Contracuarteto. Llegamos justo cuando comenzaba y para «mala suerte» nuestra estaba lleno, pero por ser un visitante un tanto habitual, cancelaron la reserva de la mejor mesa y nos la cedieron (gracias Erwin!!!), por lo cual vimos en primera fila el despliegue extraordinario de esta agrupación. Deliciosa música y talento a destajo, que buen jazz hay en Chile!!!.

Tras el intermedio y una segunda salida de la banda, quedamos en posición de seguir nuestro periplo. Una amiga de mi hermano realizaba una fiesta en el Club Soda para despedirse de sus amigos pues se marcha a Uruguay. Pues bien, para allá dirigimos nuestros pasos y como mi hermano estaba en la lista y, como es obvio, tenemos el mismo apellido, fue muy fácil ingresar a la fiesta privada.

Estaba llenísimo, en un pequeñísimo lugar se hacinaban los que querían bailar con el DJ en vivo, en otro sector, un patio, estaban los que se recuperaban del esfuerzo de bailar en un milimetro cuadrado y los que daban un poco de jugo. Ahí nos instalamos con mi hermano, nos dedicamos a conversar y a hacer people watching. Notable el observar el comportamiento ajeno, se descubren muchas cosas divertidas.

Como la hora avanzaba muy rápido, decidimos ingresar al hacinamiento bailable en busca de la amiga que se despedía. Efectivamente estaba ahí, incluso bailamos un rato entre todos, un caos ordenado por la estrechez del espacio.

Un poco después salimos rumbo a cenar, jajaja, ya pasaban las 4 de la madrugada, por lo que dirigí el taxi hacia mi sitio default, la Casa de Cena. Como siempre me esperaban atentos y con buena comida para ese hambre descomunal que solo se siente a esas horas. Una cena divertida y bien conversada, completó nuestro fantástico krrtrekking. A las 6 de la madrugada, ya era buena hora para dormir y regresamos a casa.

Pat O’Leary : bajista excepcional

Llegué a ocupar mi mesa reservada en Thelonious al momento en que los músicos ensayaban. Esperaba que estuviera lleno considerando la presencia del talentoso Patrick, pero el síndrome del lunes de Santiasco resta mucha gente de buenas opciones de disfrute musical y esta fue una de esas.

La conformación de la banda de chilenos acompañando a O’Leary auguraba un buen espectáculo. Gonzalo Palma al piano en su habitual estilo tranquilo y preciso, el hiperkinético Alejandro Espinoza en batería y el divertido René Sandoval en el contrabajo. O’Leary traía su sorpresa bajo el brazo, tocaría con un violoncello de Christian Galvez (el mejor bajista de Chile). Que extraño ver tocar un cello como si fuera un contrabajo, es increíble.

Ninguna pauta, unos pocos acordes tarareados o un nombre de tema y ahí vamos, se largaban al unísono con perfección en temas deliciosos del jazz. Bromista, Pat se autopresentó como Patricio cuando hizo la presentación de la banda, en un limpio inglés.

Tocaron por casi una hora y luego a un breve descanso. Varios amigos del músico norteamericano se hicieron presentes y las tallas iban y venían. Parecía que me encontraba en un bar neoyorkino o de San Francisco confundido en una animada fiesta de amigos.

El virtuosismo puso la nota alta, cuando me pidieron mi lápiz prestado y Patrick escribió unas cuantas notas en una pequeña hoja, la que luego cortó en dos pasando una parte al pianista y otra al contrabajista. Un par de minutos después estaban tocando un tema como si siempre lo hubiesen hecho juntos, mientras Pat sacaba sonidos notables al cello. Qué magnífica función!!!

Vibrante jornada de jazz la que se prolongó hasta pasadas las 2 de la mañana.

Mauricio Rodriguez Trío: grandes sensaciones

Una noche singular, llena de sensaciones sonoras especiales.

Cada tema de una longitud extrema, pletórica de posibilidades de improvisación y de placer extendido. Mauricio Rodriguez sabe del misterio, conoce de esa posibilidad que da la potencia del talento. ¿Lautaro Quevedo. Daniel Rodriguez y Mauricio Rodriguez dan como para componer una realidad disfrutable? Claro que sí!!!

Lo importante es que a pesar de las vacaciones de muchos, si es posible tener buen jazz un viernes por la noche. Un viernes exquisito, con sonidos originales que disfrutamos los pocos asistentes.

Lautaro, un virtuoso de los detalles en el piano y teclados. Se dió paciencia para tocar las cuerdas del piano provocar matices sonoros especiales.

Daniel Rodriguez juega con la posibilidad de un toque virtuoso, un toque percusionado único, él sabe que la guitarra talentosa de su hermano se suma al proceso creativo, no hay redención solo expiación.

Gran noche de jazz, poco transmuta al futuro, pero todo conduce hacia allá, los sonidos son suficientes para lograr el efecto. Exquisita selección.

Marcelo Moncada Quartet : filete inesperado

Thelonious es un lugar que frecuento mucho, no solo por su excelente selección de tocatas en vivo sino porque se atreve a hacer tocatas en días que todos prefieren cerrar los locales. Pues bien, un lunes de grabación de una tocata en vivo, para mí es imperdible.

Marcelo Moncada (saxos), acompañado de César Ibacache ( un piano sutil y con personalidad), Rui Salgado de Portugal ( un contrabajo virtuoso) y Frederik Meulyzer, belga y batero excelente, constituían la invitación. Desde un comienzo, pasadas las 23 horas noté los detalles. Un platillo acostado en ángulo sobre las patas de un soporte de la batería, otro plato en una butaca, eran preludio de efectos estudiados y especiales. Muchos micrófonos y algo de nerviosismo,

Exquisito trabajo, el saxo se presentó impetuoso, lleno de vida y de sentido, con movimientos extraordinarios y originales. Tikitan, Conejitos fueron los temas iniciales, los cuales dieron el tono de una tocata excepcional, a pesar de la lamentable ausencia de público. (hasta cierto punto me encanta ser testigo casi solitario de algo excepcional, puchas, el ego es mussshho).

El contrabajo me encantó, excelente como todos los instrumentos en su momento, cada tema con un gran sentido de la oportunidad, me aumentaban cada segundo la compulsión de comprarles el CD del grupo para asegurar repetición del gozo. Tras un breve descanso que ocupé en recorrer el barrio para comprar puchos, lo que no conseguí, volví a tiempo para disfrutar de la segunda parte.

Notas sutiles de piano, dieron continuidad a la efervescencia de un saxo alto, jovial y profundo, acompañado de un contrabajo y batería que generaban un fondo perfecto para completar un disfrute especial.

Gran jazz, y tengo un CD de prueba.