Cirque Eloize : maravillosa diversión bajo la Rain

Después que murió mi padre, busco ocasiones deliciosas para hacer que la vida siga siendo disfrutable para mi madre como nos gustaba a ambos. Una ocasión propicia para disfrutar con mi querida vieja, tiene  la forma de circo, un formato que probamos muchas veces juntos y que tanto yo como mi madre sabemos apreciar.

Ella adora el circo de buen nivel, asi hemos visto maravillosos espectáculos de Cirque du Soleil por ejemplo y en esta ocasión, una compañía también canadiense nos daría una buena oportunidad.

Esta compañía con un formato mucho más teatral que el Cirque du Soleil, basa su performance en el talento de sus increibles artistas y en la calidad emocional de sus guiones, historias sencillas, casi infantiles pero de una universalidad deliciosa.

Cuanto gozábamos mojarnos bajo la lluvia cuando eramos niños y ahora adultos nos molesta, que nos pasó en este camino de la vida?. Perdimos la poesía de lo simple o acaso nos acomodan las imposturas de lo serio, lo correcto, lo definido’. Recordé un cuento breve de santiago en 100 palabras que decía, descubrí que me había hecho adulto cuando en vez de chapotear en los charcos comencé a evitar pisarlos. Claro no?

Reí como me gusta, lleno del gozo pleno de lo simple y delicioso de la vida; los actores, atletas sorprendentes, virtuosos todos, nos transportaron en un viaje imaginario por nuestra niñez, por esa etapa de la vida en que adoramos saltar en los charcos de agua, mojarnos bajo la lluvia, reirnos de nuestras torpezas y sobretodo ser nosotros mismos.

Casi toda la obra transcurre bajo el imaginario de la lluvia y solo al final, como acto mágico, se desencadena la lluvia, la maravilla húmeda que generó un nuevo escenario de juegos y que divertidamente actores y público disfrutamos intensamente.

Un Teatro Municipal de Las Condes llenísimo, con adultos y niños, que fascinaron con esta linda presentación que sin necesitar la portentosa producción tecnológica de otros espectáculos, nos dió una lección de felicidad.

Lindo!!!

Cafe-bar 500 : bar temático, que lindo!!

En la terraza del Ritz Carlton, a las afueras del restaurant 365 se encuentra un lugar fantástico, lindo en todo sentido y que hoy visitamos tras asistir a una obra en el Centro Cívico de Las Condes.

Un lounge lleno de buen diseño, con el Fiat 500 como centro de la atención (hay modelos de autos a la vista), este lounge es fachoso y bien logrado. Mucho espacio, exquisita música y muy bien atendido, es el lugar ideal para conversar y pasar un buen rato.

Nos instalamos en un sillón de cuero blanco bajo las estrellas y en una tranquilidad impresionante, solo la música como factor ambiente y pedimos algunas delicias, tragos mojito y pisco sour, unos jalapeños rellenos de queso chedar y unos montaditos de loco, salsa verde y palta , deliciosos!!

Rica conversación y especialmente disfrutable pues en estas calles no hay mucho tránsito asi que es  parecido a estar en la montaña perdido en la inmensidad bajo la luna. Delicioso!!

Que buena opción!!

Maldito Chef : otra de Carpentier

Este nuevo emprendimiento de Christopher Carpentier está muy en la onda de estos últimos meses, tras sumarse a la oferta de sandwiches de  la tradicional y querida Fuente Alemana , el imperdible Dominó y la exquisita Ciudad Vieja.

Ubicado en el barrio cívico de Las Condes (barrio El Golf) esta sandwichería inaugurada en agosto 2010, muestra fehacientemente que un buen sandwich nada tiene que envidiar a un plato de comida gourmet. Un sitio de sencilla apariencia, con comedores interiores y una magnífica terraza al alero del centro cívico de Las Condes, hacen agradable desde el comienzo la experiencia. Atentos mozos te muestran el estilo Carpentier, quien sabe que en el servicio se juega el 50% de la experiencia de sus clientes (algo que comprobé tiempo atrás en su restoran C).

Llegué justo cuando se iniciaba un despliegue de luces y música navideña que la Municipalidad de Las Condes efectúa en estos días en el centro cívico, fue una afortunada casualidad que animó mi ubicación privilegiada en la terraza del maldito chef.

Pedí un Absolut Kurrant con ginger ale para refrescar mi garganta y luego, sin ningún temor calórico, me decidí por una hamburguesa doble, uno de los sandwiches potentes de este lugar, el lado B del Chef C.

A mi mesa llegó una torre de pan frica con doble hamburguesa de res, queso mantecoso derretido, cortes de pepinillos dills, buena porción de tocino, tomates, cebolla caramelizada, mayonesa y salsa barbecue. Un monstruo de sandwich, pero adecuado para calmar mi hambre descomunal.

Mientras escuchaba la potente música de la presentación navideña del municipio y gozaba de las lindas imágenes, comencé el rito de gozar mi plato. Por 25 minutos estuve disfrutando el sabor y texturas de esta delicia,  al que solo le habría sacado una parte de la cebolla caramelizada para que hubiese sido perfecto.

En medio del espectáculo vi pasar a Carpentier (le conozco pues fue compañero de colegio de mi hermano menor) con su mujer y tres hijas, imagino que rumbo al descanso. Por mi parte, solo quería seguir disfrutando mi increíble cena hasta acabarla sin remordimientos.

Maldito Chef, gran apuesta!!!