Thai House : terraza nocturna

Cenar rico en una solitaria y fresca  terraza  en una noche de media luna y algo más, es un placer que me gusta disfrutar tan a menudo como es posible. Hoy fue el turno de un sitio que he visitado en diversas ocasiones y que además está muy cerca de mi hogar.

Había un número reducido de clientes pero todos habían elegido los salones bajo techo. En mi caso, desaprovechar la disponibilidad de una terraza en esta época es un sacrilegio, por lo tanto, quedé solo en dicho sector lo cual me viene muy bien.

Partí por pedir un Pho Pia Gag (que suena raro!!) que es simplemente un arrollado primavera tailandés relleno con pasta de pollo, fideos de porotos, champiñones negros y vegetales, presentados de manera similar a los típicos arrollados primavera de la comida china. Muy sabroso y abundante!!

Para los fondos, me pareció que sería más que suficiente probar un Pla Tord Luy Suan (jeje, igual suena raro) o sea un pescado delicadamente  frito con bastante lemongrass, unos cortes de ajíes terribles y de  ajos frescos, mucho jugo de  limón, cebolla morada y maní. Un plato tremendo, que debo confesar no fui capaz de comerlo completo. La agresividad de sus sabores y la abundancia terminaron por saturarme. No obstante ello, un plato exquisito y que se combinó fantásticamente con mi Syrah Gran Reserva de Casa Silva 2007 (del rico terroir del Syrah en Lolol).

De puro tentado que soy, me entusiasmé con un postre, resultó una delicia. Fue una torta de té verde con salsa de chocolate blanco, maravillosa!!. La devoré junto con un café negro.

Rica comida Thai!!

Ambrosía : maravillosa terraza

En este lugar hay mucho esmero por brindar una buena experiencia a sus clientes. En esta época ya definitivamente calurosa, la terraza de este restorán es una maravilla de frescura, ya que además de su belleza particular (patio trasero del Museo Casa Colorada) han dispuesto ventiladores con los cuales mantener una delicada brisa.

Llegué algo pasado de revoluciones debido al calor callejero, pero una vez instalado, la atenta chica de siempre además de traerme la carta, me incluyó un vaso de agua helada con unos granos de arándanos en su interior. Delicado gesto, que comenzó a disipar la canícula y comenzar el disfrute.

Para comenzar, que mejor que un tártaro de filete, trocitos de filete crudo, aceite de olivas, alcaparras, trozos de aceitura negra y champiñones, todo envuelto en un magnífico jamón artesanal de wagyu. Exquisito!!

Mientras decidía mi plato de fondo, chequeé si Carolina seguía siendo la chef del lugar y para mi sorpresa, ella se encuentra perfeccionándose en Francia y es reemplazada por su mano derecha, Ximena, quien mantiene de excelente forma el nivel de la cocina de autor de Ambrosía.

Mi plato de fondo lo seleccioné muy rápido ya que era definitivamente seductor, un risotto de ostiones, camarores y shitaki (un champiñón del este asiático). Para disfrutarlo, pedí una botella de pinot noir de William Cole Mirador 2009. Delicioso placer!!.

Ya en la hora tope, disfruté un budín de albaricoque con salsa inglesa, berries y una salsa tipo pastelera, que estaba maravilloso. Solo quedaba tomar el café y regresar.

La terraza del Ambrosía es un placer 100% repetible.

Liguria : siempre disponible

Una larga mañana de trabajo con mi gran equipo de proyectos especiales y que se extendió entretenidamente hasta media tarde, se tradujo en que dos de nosotros llegamos a almorzar casi a las 17 horas a uno de los pocos lugares que nunca cierra su sabrosa cocina. Por supuesto que me refiero al Liguria de Manuel Montt.

Instalados en una de las mesas al exterior del local, nos preparamos a disfrutar un buen almuerzo mientras una creciente brisa nos liberaba del calor de la mañana. Partimos con unos kir royale y habida cuenta del hambre y la hora, pedimos una plancha de queso de cabra fundido con rúcula, una contundente y sabrosa entrada para compartir, mientras decidíamos que almorzar.

La selección de un buen plato de fondo nuevamente favoreció a esa mechada extraordinaria con spaghetti y ricota, que con seguridad debe ser el plato que más veces he probado en este sitio. Delicioso!!

Acompañamos el placer gastronómico con una botella del genial ensamblaje Botalcura El Delirio, un reserva de los mejores e ideal para este plato. Fantástica y probadísima combinación.

Para los postres, considerando la hora y la animada conversación, decidimos cambiarlos por un buen ron. Gran idea!!

Brujas de Cachiche : sandwichería que comienza

Una salida a cenar tarde pero con un objetivo claro, probar delicias de la cocina peruana, nos llevó hacia un lugar conocido pero que había mutado en estas últimas semanas. En la misma casona en donde se encontraba el rico restoran de comida peruana Pantaleón, ahora existe una sandwichería peruana llamada como el homónimo y exquisito lugar en Lima, Brujas de Cachiche.

Si bien la carta tiene una gran cantidad de platos tradicionales de la cocina peruana, lo novedoso claramente son los sandwiches. Por supuesto, no hay nada más placentero para mí que probar algo nuevo y no desperdiciaría la ocasión.

Para partir, un clásico peruano, un ceviche mixto y el acompañamiento por excelencia, pisco sour peruano. Para los fondos, mi compañía, prefirió algo más tradicional y bajo en calorías; en mi caso, sería un rico sandwich. La oferta de vinos no era muy abundante y carecen de carta de vinos, por lo que me debí conformar con unas copas de  cabernet sauvignon reserva de Santa Digna.

De la lista de opciones, me tenté con una hamburguesa casera envuelta en tocino, champiñones salteados con una cubierta de queso mozarella, algo de lechuga y papas hilo. Sobre esta «torre» salsas de ají amarillo, de ajo y otras, todo ello puesto en un enorme pan frica calientito. Mmmhhhh, demasiado rico!!!!

Una experiencia disfrutable para mí, incluye además de la buena comida, el lugar, el diseño, la presentación y muchas más, pero normalmente me resulta en extremo gravitante la calidad del servicio. Claramente ese es el punto más flaco de este nuevo sitio, deben mejorar mucho!!. Perdoné este bajo desempeño solo porque están en marcha blanca, pero eché de menos que quién administre el lugar no estuviese aprendiendo como mejorar. Considerando lo rico de la oferta gastronómica, se esmeren en  un mejor servicio o no tendrán buen futuro.

Me quedo con lo positivo, es un acierto una sandwichería peruana, una variante sabrosa que hace falta en Santiasco.

Pasta e Vino : un placer envidiable

Desde que se instaló este restaurant en Santiasco he esperado el día en que coincidan los astros para asistir a este lugar. Hoy fui bendecido por las casualidades que me encanta constatar, ya que sin mediar reserva alguna, me dejé caer en este palacio (Hotel Boutique The Aubrey) ubicado en un faldeo del cerro San Cristóbal y había una mesa perfecta en la increíble terraza del lugar. Por fin, una cena en Pasta e Vino!!!

La terraza de piedra, rodeada de murallones también de piedra que sostienen el cerro y que con una delicada arquitectura realzada por muy bien ubicados focos, hacen que se sienta un inédito placer por tanta belleza. Se siente caer agua, con lo cual los oídos recogen y suman otro disfrute a la experiencia. El mobiliario de buen diseño (sillas Valdés por supuesto) y una exquisita atención, inician una cena definitivamente increíble.

La vista al interior del hotel agazaja los ojos, impecable, majestuoso y hermoso lugar. Desde mi mesa podía ver todo lo que ocurría en los comedores interiores y en la linda terraza que elegí. Para partir, una botella de agua que prepara mi boca para el placer gastronómico.Mientras leía la carta, llegó un set de panecilllos y un pote de mantequilla y emulsionado de aceite de olivas, como es habitual en un buen restoran italiano. También me regalaron un appetizer de salmón fascinante.

Elegí un plato de gnocchi de roquefort salteado a la mantequilla, con hierbas, nueces y zetas. De solo recordarlo, lo comería de nuevo, demasiado exquisito. Incorporé al placer una botella de vino que seleccioné de la excelente carta disponible, Secretos de Viu Manent reserva carmenere del 2009, delicioso.

Para el postre, no resití las ganas de probar una pannacotta con salsa de berries, un merecido disfrute de cierre.

Maravillosa cena, precioso lugar!!

Cenando en Machu Pichu : rica comida peruana

Hambriento como casi siempre estoy, me fui a cenar a un sitio habitual de mis salidas urgentes. Me refiero a Machu Pichu, un restoran peruano de los que abundan en el barrio Manuel  Montt y que tienen suficiente cuento como para ser notables.

Como ya es habitual partí con mi agua mineral para lavar las tripas y prepararme conscientemente a disfrutar algo rico. Lo primero que vino a mi mente cuando tomé la carta del lugar fue una causa limeña, la que más me gusta es la causa de atún y no demoré un segundo en pedirla como entrada mientras decidía el resto. Un plato potente y especialmente delicioso no solo en sabores sino que en presentación, soy definitivamente  impresionable con los colores, aromas y formas que una buena factura puede hacer de un plato. Exquisito!!!

En la carta, descubrí un plato que no había probado, se trató de la corvina al shiwanco, en definitiva, trozos de corvina al horno cubiertas con una salsa de tamarindo, cebollín, pimentón, champignones y apio maravillosa. cada bocado fue una delicia repetible. Acompañé esta exquisitez con una delicada botella de pinot noir Viña Mar 2009, que estaba excelente en aromas, sabor y temperatura.

Gran cena y cada vez mejor lugar!!

Cara de Palo : tanto tiempo ha pasado

Hay algunos restoranes que llevan una buena cantidad de años en mis listas de preferencias y hace muchísimo tiempo que no visitaba el Cara de Palo.

Debo reconocer que comparado con 5 años atrás se ve venido a menos, quizás el hecho que ofrezcan menús y un exceso de tablas, me prejuzgue. No obstante ello, es un ícono del barrio Brasil (Cumming) y no tenía intención de cambiar de destino.

Por supuesto que si venía a este sitio, mi elección era volver a probar delicias de carnes exóticas. La carta tiene desde ciervo, avestruz hasta wagyu. En mi caso, prefiero el avestruz y en la carta aparecía un plato de  Avestruz con salsa de frutos rojos y no pude evitar la tentación. Para acompañar mi carne, nada mejor que una buena porción de papas duquesa (de hecho, llegó una fuente enorme). En vista y considerando lo que pretendía almorzar, me hice acompañar de una botella de carmenere Cuvée Gran Reserva de Misiones de Rengo 2008. Gran combinación!!

Los abundantes filetes de avestruz con su característico color oscuro estaban cubiertos por una salsa que además de los frutos rojos característicos, sobresalían unos sorpresivos arándanos que aportaron el toque fascinante. La verdad es que el almuerzo era descomunal y a pesar de mi esfuerzo, no fui capaz de comerlo todo. Ni hablar de postre, pedí mi habitual café negro, pagué la cuenta y rogué por ser capaz de digerir tanta comida. En todo caso, estuvo exquisito!!!

Al cierre, es claro que ya no es el mismo nivel que tenía el restorán años atrás, la comida sigue siendo rica, pero bajó su desempeño y se sometió a las implacables leyes del mercado.

Regreso a Majestic : delicias por doquier

Cuando pienso en comida india y especialmente en un día con muchas ganas de comer rico, entre varias opciones, me entusiasmo con este rico restoran Majestic. Debo confesar que mientras me dirijo a este sitio, mis jugos gástricos bailan de placer.

Venía de un largo krrtrekking, sediento y hambriento, por lo que partí por un gran vaso de agua mineral helada y luego pedí un Kima Nan, un exquisito pan indio relleno con carne molida de cordero y especias. Un preámbulo de los sabores que continuarían.

De la deliciosa oferta de Majestic, hoy decidí por un Fish Amarsari, exquisitos trozos de congrio frito marinados con anís y harina de garbanzos, con ese rojizo característico de muchos platos del lugar. Llegó sobre un plato de fierro caliente y sobre una cama de cebollas y pepinos. Mmmmhhh, que maravilla!!.

Para acompañar mi plato, nada mejor que un Ginga Biryani, una fuente de arroz con camarones ecuatorianos y especias, que venían a pedir de boca. Además, solicité una botella de Syrah Leyda Classic Reserva 2009 que estuvo magnífica con mi selección gastronómica.

Para los postres, no necesitaba mirar la carta, hay uno que me enloquece y es el Kulfi de Pistachos, divino!!.

Solo me quedaba beber un buen café negro y lentamente iniciar el regreso al merecido descanso.

Per Piacere : un placer italiano en Boulevard Maturana

Hace casi un año que no iba por este lugar en el barrio Brasil, pero tengo gratos recuerdos gastronómicos y de los otros que hacen grato un retorno.

Un breve viaje en taxi desde el centro de Santiasco me dejó a las puertas de este sitio, aunque antes de ingresar me di una pequeña vuelta para comprobar si los otros lugares del boulevard estaban vigentes. Tres de ellos cerrados, pues atienden por la noche y dos abiertos. En cualquier caso, yo venía por comida italiana pues tenía antojos de carbohidratos deliciosos.

No había mucha gente, pero eso es agradable para mí, ya que me asegura ser mejor atendido. Partí por elegir mi mesa favorita, ubicada en un pequeño altillo que me da una panorámica del lugar y amplía mi disfrute visual. Llegó mi botella de agua mineral, para preparar el disfrute y me puse a leer el diario-menú (un detalle encantador  que se repite en varios locales del sector brasil y yungay), en busca de algo delicioso. Elegí inicialmente una Lasagna Piacere, pero después de saber que fuera de carta había Risotto de Locos, no tuve dudas en cambiar.

Mientras esperaba mi ansiado plato, llegaron unos cortes de baguette con olivas y orégano además de un pote con palta y albahaca, (delicioso!!!), con lo cual la espera fue simplemente un placer.

Para acompañar mi risotto de locos, pedí una botella de pinot noir de la nutrida cava del boulevard, eligiendo un Quintay 2008 del valle de Casablanca que fue extraordinario acompañante de mi abundante y rico plato de risotto. El único ingrediente que le faltaba es un fetiche personal, pedí la pimienta fresca y ajusté el molinillo para obtener esos cortes grandes de pimienta que me encanta descubrir mientras mastico la comida. maravillosos!!

Para ser muy franco, además de exquisito era demasiado grande mi plato y era imposible incluir nada más en mi almuerzo, pero mi disfrute estuvo en el punto adecuado.

Per Piacere, de verdad, puro placer!!

El Chalán : nunca falla en fomingos aunque sea muy tarde

Amanecí muy congestionado y debí cancelar de madrugada mi salida a la montaña. Era el reencuentro del año con un cerro que me gusta mucho, El Pintor. Pero, como dice el dicho, al mal tiempo buena cara y decidí dormir hasta más tarde para hacerme cargo de la terrible congestión matinal.

Como no estoy dispuesto sino a pasarlo bien, una vez que recuperé la energía suficiente para levantarme, decidí que  sería un buen día para disfrutar un rico almuerzo y luego una sesión de películas proyectadas en la pared de mi departamento. Buen panorama!!!

Salí a buscar el lugar de mi almuerzo y siendo bastante avanzada la hora, me fui a la segura y me trasladé a El Chalán, un sitio que ya tengo bien catalogado por la calidad de su comida y del servicio. Además que tiene esa bendita ventaja de atender hasta muy avanzado el horario.

Me instalé en un rica y espaciosa terraza que me llena el gusto y pedí una de mis  mezclas perfectas, un ceviche de pescado con un pisco sour a la peruana. Nunca falla!!!

En la carta, mis ojos desfilaron por una nutrida oferta de platos peruanos, hasta que detecté uno que no había probado en ese lugar. Un seco de cordero, trozos de blando cordero cocinados en una salsa de cilantro con una porción de arroz y frijoles a la crema de acompañamiento. Fantástico!!, un desfile de sabores que disfruté junto a un Trío cabernet sauvignon, syrah y cabernet franc.

El postre merecido fue un mousse de maracuyá, que rico sabor!!!. El cierre, por supuesto, una tacita de café negro.

Tras estos placeres, el resto de la tarde fue asistir a mi cine personal viendo dos películas divertidísimas, con las cuales completé mi terapia personal de recuperación. Gran día!!